¿Quién tiene que hacer fundraising?
Toda causa, no lucrativa, que quiera conseguir (mejor y más rápidamente) sus fines y no disponga de recursos propios, ilimitados, para hacerlo.
Dicho de otro modo:
Toda causa no lucrativa.
Y, dicho eso, no haría falta decir nada más...
Si lo tienes así de claro, no necesitas seguir hacia abajo, leyendo este artículo.
Si no lo tienes tan claro...
Uff... sigue leyendo...
A partir de aquí, solo para los más reticentes...
Cuando una organización dice que no necesita hacer fundraising... que no necesita captar más fondos de los que ya dispone...
Está condenada al fracaso, (al menos a medio o largo plazo).
Y, además, es que lo merece.
Por conformista.
Se supone que una (típica) organización sin ánimo de lucro, sea lo que sea a lo que se dedique, nace de la necesidad e inquietud de cambiar o mejorar algo.
Y las cosas se cambian y mejoran, con medios (humanos y materiales).
Y estos, en general (cuentos de hadas y milagros aparte —aunque estos sí existen—), se consiguen mejor, mejores y más rápidamente, con recursos.
Con dinero.
Es una obviedad que todos conocemos.
(aunque, los reticentes, al menos, suelen olvidar)
Cuantos más recursos (lee dinero), más medios y, consecuentemente, más y mejores...
Resultados.
Y la tremenda obviedad es que, en general y con una administración de los medios honrada, eficaz y eficiente, en toda organización humana se cumple inexorablemente esta máxima:
Más dinero = más resultados (y, estos, más rápido).
Siempre.
(con la cautela mencionada de administración de recursos eficaz y eficiente)
Entonces...
¿Puede una organización, en su sano juicio, renunciar a más, mejores y más rápidos resultados en la consecución de sus objetivos y fines?
No hay más preguntas, Señoría.